Cuidado con la obsesión por quedar embarazada

En el mundo hoy, crece el número de mujeres que se cuestionan sobre su necesidad de ser mamás, pero que no tienen las condiciones para serlo. También muchas que, junto a sus parejas, intentan durante meses y años llegar a un embarazo y simplemente no se da. Es ahí cuando aparece la llamada  obsesión por conseguir un embarazo, la cual puede ser peligrosa si se escala a niveles poco saludables.

Primero que todo, cada cuerpo y cada pareja es única. Es inútil compararse con otras personas o parejas que tienen hijos. Además, preocuparse no va a acelerar el proceso: se calcula que una pareja sana y fértil puede tardar de 1 a 6 meses en concebir, mientras que otra pareja en las mismas condiciones lo logre en 1 o 2 meses. Nada está escrito, lo importante es siempre mantener un buen ánimo para seguir buscando soluciones distintas y que estas sean asesoradas por un médico para evitar poner en riesgo tu salud.

Las estadísticas hablan de que 30% de las parejas lo logran en el primer ciclo, 59% en 3 ciclos, 80% en 6 ciclos, 91% en 36 ciclos (3 años) y entre 93 y 95% en 48 ciclos o 4 años de búsqueda. Sin embargo, es importante considerar que según muchos especialistas, el estrés y la ansiedad respecto al tema puede acabar por convertirse en enemigo de la meta.

Si te has preguntado ¿por qué no me puedo quedar embarazada?, desde ya te decimos que el estrés tiende a cambiar la química del cuerpo femenino, alterando el curso hormonal, y produciendo óvulos inmaduros que no podrán implantarse adecuadamente en el útero. Asimismo, la calidad del semen puede reducirse y alterarse por cuenta de la angustia y la obsesión. En resumen, querer quedar embarazada rápido llevará probablemente al resultado contrario, una recomendación puede ser tener paciencia y disfrutar el camino con calma.

Calma, mucha calma. ¡Todo llega a su debido tiempo!